Todos nos creemos con derecho a tener una vida cómoda y plácida. No es justo......decimos a menudo.
La vida no es justa ni injusta, simplemente es vida.
La salud es un derecho del ser humano según la OMS, evidente,pero nadie puede evitar que enfermes de según que cosas...........es justo ? es injusto ? que se yo.Como hablamos de la salud, lo podemos hacer extensivo a cualquier campo: el dinero, el amor, la familia etc....
Cuantas gente vive convencida de que a los demás todo le va bien, y a ellos no?, pues mucha.
Durante el tiempo (poco o mucho) que transitamos por esta vida, van pasando cosas, que son buenas o malas en general, o buenas o malas según para quién.
Son simplemente circunstancias, que las podemos aceptar o hacer de ellas un motivo para tirar la toalla. Cuantos más recursos personales tengamos más posibilidades hay de buscar salidas, es cierto, pero no podemos pensar que a los demás se los han regalado.
Si cada vez que aparece un contratiempo, un obstáculo o una situación que no se desarrolla como teníamos pensado, enfocamos toda nuestra energía en buscar soluciones, o modificar lo que podamos, ya no nos anclamos en la pena, el desánimo o la "mala suerte".
Después de más de 25 años de profesión, veo a diario ejemplos de superación que me siguen poniedo la carne de gallina y que todavía he de aguantarme para no aplaudir, pero por el contrario también veo dramas patéticos por cosas aparentemente insignificantes. No podemos juzgar. Si podemos intentar comprender.
Parte de mi misión como médico es ayudar a la gente a superarse desde cualquier circustancia, y estoy agradecida por las lecciones que recibo a diario como contraprestación.
El premio de esta semana se lo voy a dar al marido de una amiga. Desde hace unos años ella, profesional prestigiosa ha ido desarrollando una demencia de nosequé-nime importa, que la ha llevado a "desapuntarse" de la vida en general. Una de las personas más activas y entusiastas que he cooncido, a causa de esta degradante enfermedad, vive sentada en un sofá sin hacer nada de nada, ni arreglarse y casi sin hablar.Pués él, recien jubilado, más prestigioso todavía, está bien. Está tranquilo,
aceptando la situación, entusiasmado con su nueva faceta de "chef", y valorando la suerte que ha tenido en la vida de haber hecho tantas cosas y vivido tan feliz. Dice que sus amigos se preocupan por él y la dependencia. Yo lo vi sereno, con amor y aceptando la nueva etapa de la vida que le toca vivir, agradecido de la profesión, de los hijos, de los nietos, de la música y de los amigos que sabe que seguimos estando allí aunque se hayan acabado los viajes y las clases de baile.
Un aplauso para los valientes!!!
